Son emprendimientos, talleres de producción artesanal de velas, carpintería y costura, donde participan personas en un tratamiento integral de adicciones que llegan a través de una organización que los acompaña en su proceso. En los talleres se respetan sus tiempos, procesos, se transmite la cultura del trabajo fortaleciendo sus capacidades y generando productos de alta calidad que puedan ser comercializables.
Esta venta de productos pretende generar un ciclo productivo y de sustentabilidad para poder mantener los talleres. Es una experiencia de oportunidad de cambio tanto para los integrantes del taller como para las personas que adquieren el producto realizado por ellos, ya que ese intercambio busca fomentar el encuentro y la transformación.
Trabajo en equipo
Dignidad
Responsabilidad
El Emprendimiento de Velas artesanales es el programa más importante de Luz de Esperanza donde jóvenes de las Villa 31 pueden completar el proceso de rehabilitación por consumo de drogas que atraviesan en el Centro Barrial Padre Carlos Mugica del Hogar de Cristo en la Villa 3 y así formar parte del mundo laboral y aprender de las responsabilidades que conlleva el mismo. El Taller de velas es un espacio que los ayuda a conectarse con un trabajo mientras están en acompañamiento y así obtener más posibilidades de crecimiento para su futuro.
En el taller se respetan sus tiempos, procesos, se transmite la cultura del trabajo fortaleciendo sus capacidades y generando productos de alta calidad que puedan ser comercializables. Esta venta de productos genera un ciclo productivo y de sustentabilidad que aporta al mantenimiento de los talleres. Es una experiencia de oportunidad de cambio tanto para los integrantes del taller como para las personas que adquieren el producto realizado por ellos, ya que ese intercambio quiere fomentar el encuentro y la transformación.
Comenzó en 2012 y desde entonces 30 jóvenes asistieron cada año. Es decir, son 250 los/as jóvenes que participaron directamente del emprendimiento, que se involucraron en el proceso, adquirieron valores de la cultura del trabajo y transformaron sus vidas.
A través del Emprendimiento de Costura, Luz de Esperanza fomenta la cultura, los valores y la dignificación del trabajo en jóvenes mujeres de entre 18 a 33 años que transitan la recuperación por adicciones en el Centro Barrial Padre Carlos Mugica del Hogar de Cristo en la Villa 31, creando un camino de reinserción laboral y social.
Se busca que las mujeres que participan adquieran o potencien sus conocimientos en estas áreas para desarrollar su trabajo en la elaboración y comercialización de productos textiles obteniendo una fuente de trabajo productivo que contribuya a obtener ingresos para el sostenimiento de sus hogares, desarrollen sus capacidades, logren una mejor calidad de vida y de este modo, no recaigan en los hábitos nocivos relacionados al consumo de sustancias.
En 2016 se inauguró el emprendimiento y la participación constante de las primeras 10 mujeres demostró el interés por participar de este espacio donde se encuentran para compartir entre ellas, donde encuentran contención y especialmente donde se independizan y empoderan potenciando sus propias habilidades.
Citando un nuevo informe (2018) de ONU mujeres “no solo las mujeres están en peor situación que los hombres, sino que hay ciertos grupos de mujeres de ciertos grupos sociales que están muchísimo peor. Son estos grupos a los que debemos llegar si queremos cumplir con la promesa de no dejar a nadie atrás”